Noticias

La CSI exigió que los trabajadores no sigan pagando los costos de la crisis

En pleno contexto de crisis económica, la ciudad de Vancouver, Canadá, fue anfitriona del segundo Congreso Mundial de la Confederación Sindical Internacional, que reunió a 1.400 delegados y delegadas en representación de 176 millones de miembros provenientes de 155 países y territorios.
Bajo el lema “Ahora los pueblos-de la crisis a la justicia global”, el eje de discusión fue como enfrentar la complicada situación que atraviesan las economías de Europa y Estados Unidos, haciendo hincapié en evitar las medidas de ajuste salarial y contracción del empleo por parte de los gobiernos para que la crisis no lo paguen los trabajadores (ver documento adjunto).
La idea promovida por los dirigentes presentes en el Congreso fue la de justicia social y desarrollo equitativo y sustentable, reemplazando a las recetas ortodoxas de ajuste que llevan al desempleo y la pobreza.
En el quinto y último día del Congreso, la dirigente australiana Sharan Burrow fue elegida sucesora de Guy Ryder y ocupará por cuatro años el cargo de Secretaria general.
“La CSI se sigue enfrentando a muchos desafíos a raíz de la crisis financiera global. Aunque hemos sido testigos de algunos resultados excepcionales en un reducido número de países como Brasil, Argentina, China y Australia, la recuperación en el empleo no ha sido universal. El desempleo mundial y el subempleo han seguido aumentando a lo largo de 2009 y durante el primer semestre de este año”, añadió Burrow.
A su vez, Michael Sommer, DGB, Alemania, fue elegido Presidente; Jaap Wienen fue elegido secretario general adjunto; Luc Cortebeeck, CSC Belgica, Presidente adjunto y Nair Goulart, Força Sindical, fue elegido Presidenta adjunta.

Desde el Cono Sur se reclamó un modelo con empleo decente

La presidente argentina Cristina Fernández de Kirchner fue una de las oradoras invitadas al Congreso. Acompañada por el Ministro de Trabajo Carlos Tomada y dirigentes de la CGT, como Juan C. Schmid y Gerardo Martínez, la mandataria reafirmo el camino que transita la Argentina desde 2003.
"En el contexto de la crisis en Argentina, mi obsesión era conservar y crear puestos de trabajo", indicó Cristina, entre los aplausos de los delegados y delegadas. "Los países del G20 y los países europeos afectados actualmente por las medidas draconianas de reajuste económico deberían recordar el caso argentino", añadió.
Previo a la reunión del G-20 en Ontario, Cristina volvió a la carga contra la especulación financiera: "necesitamos una reglamentación profunda de los movimientos de capital incontrolados que han sido una de las causas principales de la crisis que conocemos hoy en día. De hecho, se requiere una reforma a fondo de las instituciones multilaterales que gestionan las consecuencias de la crisis".

Mensaje para el G-20

“Los líderes del G20 corren el riesgo de caer en un sonambulismo que provoque una doble recesión a causa de su premura por reducir a la mitad el déficit fiscal para el año 2013 o incluso antes”, declararon representantes de una delegación sindical internacional presente en Toronto al final de la Cumbre del G20.
Los dirigentes sindicales consideraron que Toronto dejó un mensaje ambiguo y contradictorio. "El G20 ha establecido un marco para un crecimiento sólido, sostenible y equilibrado, sin embargo, las decisiones que ha tomado podrían llevar al mundo hacia la dirección opuesta", afirmó Evans.
En lo que respecta a la regulación financiera, los sindicatos se muestran irritados ante las continuas declaraciones de "buenas intenciones" en lugar de que se pongan en acción, y porque no hay progresos en lo que se refiere al establecimiento de un impuesto a las transacciones financieras.

Fuente: CSI/Rebanadas de realidad.

Archivos Complementarios

© INCASUR. Todos los derechos reservados.

Alberti 36. Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Tel.: 11-3083-9696 / 11-6836-5658 -- comunicacion@incasur.org