Por Ricardo Alvarellos.
Las protestas obreras no sólo ocurren en la Argentina sino que también recorren el escenario francés. En las últimas semanas, el gobierno de Hollande impulsó una reforma laboral y social que, de ser aprobada, destripa las bases del estado de bienestar de ese país.
Ni los estudiantes ni los trabajadores están dispuestos a ello. Huelgas y marchas que interrumpen el tránsito son parte de la vida cotidiana. Ayer se movilizaron por París más de 50.000 trabajadores conducidos por la CGT. Para el jueves y viernes los sindicatos del transporte tienen previsto continuar con las protestas y resistir el plan de ajuste.
Como se podrá ver, no sólo los argentinos enfrentamos una andanada neoliberal, también están los brasileños y franceses. ¿Será el signo de los nuevos tiempos?